Dani Negri, destacada artista textil e investigadora originaria de Ovalle, en la región de Coquimbo, junto con la artista Constanza Hermosilla, de Concepción, región del Bío-Bío, ofrecerán una experiencia única.
La exposición, curada por la Galería Metropolitana de Santiago de Chile, reúne obras que exploran el poder del arte textil como un medio para la memoria colectiva y la conexión comunitaria.
A lo largo de su carrera, Negri se ha dedicado a investigar cómo las prácticas textiles pueden capturar y preservar memorias de épocas en las que la comunidad era vista como un camino hacia el bienestar social.
Las obras de la artista no solo muestran el trabajo artesanal, sino que también invitan al espectador a reflexionar sobre la importancia de estos gestos colectivos en el contexto del mundo actual.
CulturaLatina tuvo la oportunidad de entrevistar a Dani Negri.
¿Por qué elegiste el arte textil como medio principal en tu trabajo?
Herede el oficio textil de mi abuela materna Amalia Carvajal Flores, trabajadora textil del Hospital de Ovalle. El oficio textil es una herramienta noble para trabajar tanto individual como colectivamente. Algo importante por lo cual yo decidí permanecer y cultivar este oficio es que en él vive una memoria muy antigua, tanto en las herramientas en torno al textil, en los puntos de bordado, las telas, etc. Otro valor importante es el tiempo. La práctica textil es un “hacer” donde es necesaria la paciencia, la dedicación y la calma, valores muy importantes a ejercitar en nuestra sociedad.
¿Qué significa para ti participar en Encuentros Textiles en la ciudad de Viena, y cómo crees que este contexto influye en la interpretación de tu obra?
Participar en esta exposición representa una gran oportunidad. Por un lado, me permite profundizar mi vínculo con Galería Metropolitana, curadores de esta exposición en Hinterland. Exponer junto a otra artista chilena, Constanza Hermosilla, también es muy significativo para mí.
No tengo expectativas específicas sobre cómo influirá este contexto en mi trabajo; eso es algo que descubriré una vez inaugurada la exposición y en la vinculación con Hinterland como con la agrupación Feministisches* Bloco Descolonial.
Es importante mencionar que mi archivo llamado Archivo Emotivo amateur acompaña uno de los textiles de esta exposición, está mayormente en español, salvo por un documento en alemán y unos pocos en inglés. Aunque esta barrera lingüística podría ser una dificultad, para mí representa una gran oportunidad de conectar con la comunidad hispanohablante y, sobre todo, con la comunidad chilena exiliada en Viena durante los años setenta.
Por lo que tengo entendido, esta exposición destaca el cruce entre la “alta cultura” y la cultura popular. ¿Cómo abordas este cruce?
El oficio textil, la mano de obra artesanal y el trabajo colectivo en muchos contextos aún son marginalizados, considerados como un "arte menor" o simplemente excluidos de la denominada “alta cultura”. Considero importante posicionar el trabajo colectivo y artesanal, realizado en un tiempo no neoliberal, y fomentar el aprendizaje horizontal a través de la observación desprejuiciada de este tipo de prácticas. Nuestra cultura está más acostumbrada a valorar obras individuales, y muchas veces la mano de obra artesanal queda invisibilizada.
Para mí, las piezas colectivas y la manufactura artesanal son refrescantes: representan un proceso constante que transforma a la “alta cultura” ¡enhorabuena!
La exposición incluye un homenaje a la obra colectiva de la UNCTAD III de 1972. ¿Cuéntanos Por qué te parece importante reivindicar este tipo de trabajos en la actualidad?
Los años setenta fueron una época crucial que es necesario revalorizar, no desde una perspectiva histórica rígida ni romántica, sino como una acción directa para nuestro presente y una oportunidad llena de futuro. La solidaridad internacional de los años setenta nos deja un legado importante, al mostrarnos caminos de justicia social, resistencia al capitalismo y trabajo comunitario muy relevantes hoy.
Quizás hoy la solidaridad internacional se manifieste en una escala más artesanal y pequeña, pero los afectos y vínculos que genera son esenciales para ayudarnos a no sentirnos solos y caminar juntos en comunidad.
En el taller “Aguja e hilo: Herramientas cotidianas para reparar el tejido común” se habla de la arpillera chilena. ¿Qué relevancia tiene en la actualidad este material como expresión de resistencia y memoria histórica?
Para mí, la arpillera chilena simboliza que, en medio de la adversidad y tristeza absolutas, una mano delicada, pero determinada puede tomar la aguja y el hilo para construir su propia historia. La arpillera también representa el poder del trabajo colectivo, donde la hermandad del grupo y el poder de estar acompañadas permite sostener el dolor, dialogarlo y ejercer el cuidado mutuo. Las comunidades organizadas en torno a la arpillera se vuelven resilientes, y aunque la justicia muchas veces no llega, su historia de resistencia y cuidado son un ejemplo de memoria viva.
¿Qué te gustaría que los visitantes de la exposición se lleven de tu obra y la experiencia artística que ofreces en tu taller, en conjunto con Constanza Hermosilla?
Me gustaría que los visitantes se lleven la sensación de la fuerza del trabajo colectivo, tan necesaria en estos tiempos de soledad e individualismo. En cuanto a mi archivo, espero que lo revisen y me dejen sus comentarios en el cuaderno que está en el mismo Archivo. Respecto al taller, me gusta imaginar que construirán algo con sus manos, ya sea una creación individual o colectiva, pero por sobre todo que puedan experimentar el tiempo artesanal y la escucha comunitaria.
Para Constanza es la potencia del trabajar con las manos, donde varios cuerpos juntos crean al unísono, reconociendo en este acto un acto de resistencia a las lógicas de los modos de producción del consumo constante, donde los cuerpos en sincronía y complicidad trabajan realizando un acto colectivo, recordándonos una belleza en el hacer que quizás ya hemos olvidado.
Encuentros Textiles “Textile Encounters”
Inauguración: 13 de noviembre de 2024 19h
Artistas / Artists: Dani Negri, Constanza Hermosilla
Comisariado por Galeria Metropolitana, Santiago de Chile / Chile
Taller
14 de noviembre de 2024, de 17:00 a 20:00 horas
AGUJA E HILO: Herramientas cotidianas para reparar el tejido común
Lugar: Hinterland, Krongasse 20, 1050 Viena
Inscripción por e-mail: art@hinterland.ag
Invitación a una sesión abierta para hablar de las «arpilleras» de la resistencia chilena surgidas durante la dictadura militar. Reflexionaremos sobre su actualidad a través de la obra Homenaje al trabajo colectivo de la UNCTAD III, 1972, que forma parte de la exposición. Durante la jornada también se realizará una introducción a las técnicas de bordado para familiarizar a los participantes con esta artesanía textil.
Materiales necesarios: trozos de tela, botones, hilos, agujas de bordar y alfileres. No se requieren conocimientos previos.