La depresión ocupa la principal posición entre los trastornos mentales, y es dos veces más frecuente en mujeres que hombres. Para los trastornos afectivos, de ansiedad y por consumo de sustancias en adultos, graves y moderados, la mediana de la brecha de tratamiento es de 73,5% en la Región de las Américas, 47,2% en América del Norte y 77,9% en América Latina y el Caribe (ALC). La brecha para la esquizofrenia en ALC es de 56,9%, para la depresión es de 73,9% y para el alcohol es de 85,1%. (Datos de la Organización Panamericana de la Salud - OPS)
La pandemia provocada por el Covid-19 contribuyó al aumento de enfermedades mentales, que junto al miedo, al pánico, a la desinformación generada en los medios de comunicación, al distanciamiento social (requerido para evitar el contagio) y la reducción de relaciones sociales ampliaron los trastornos mentales a nivel mundial.
Es necesario ser conscientes de los síntomas de la falta de salud mental, porque las enfermedades de origen psicológico del siglo XXI son muy limitantes. Por ejemplo hay personas que no pueden asistir más a su entorno laboral durante largos períodos de tiempo (Síndrome de Burnout).
Las personas enfermas a nivel mental, emocional y psicológico no saben cómo pedir ayuda. Las enfermedades físicas son más fáciles de diagnosticar y curar, pero las enfermedades mentales no siempre lo son y ni siquiera se ven.
Enfermedades mentales frecuentes: depresión, pánico, trastornos alimentarios y afectivos, ansiedad, soledad (especialmente entre ancianas y ancianos, así como viudas y viudos), estrés y esquizofrenia.
Consejos para prevenir problemas de salud mental
· Reducir el estrés.
· Inlcuir hábitos de vida saludable (buena alimentación, hacer deporte, técnicas de relajación).
· Rodearse de personas sanas y alegres.
· Ser amable contigo misma/o y con los demás.
· Respetarse a uno mismo.
El primer paso para vencer una enfermedad mental es superar el prejuicio de pedir ayuda. Los trastornos mentales son enfermedades y, como tales, pueden ser tratados.
Reflexionemos sobre el tema y mostremos solidaridad con aquellos que sufren en silencio. Oscar Wilde (1854-1900), uno de los dramaturgos más destacados del Londres victoriano tardío dijo una inolvidable frase:
“Amarse a un mismo es el comienzo de un romance que dura toda la vida”. (Sich selbst lieben ist der Beginn einer lebenslangen Romanze). Una premisa clave para mantener una salud mental sana.